De acuerdo con estimaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS), actualmente un 3.8% de la población global padece depresión, es decir, alrededor de 280 millones de personas, situación en donde las mujeres son las más propensas a desarrollarla, enfermedad mental que estaría estrechamente vinculada con la comida chatarra, ya que un nuevo estudio reveló cuál es la relación que mantiene la comida procesada con dicho padecimiento. 

Si bien se sabe que comer en exceso comida procesada puede influir en los síntomas de la depresión, una reciente investigación mostró en qué medida la comida ultra procesada afecta al paciente agravando más su enfermedad, así como su volumen de sustancia gris de su circuito cerebral y parámetros de inflamación. 

El estudio fue realizado por científicos del Centro de Investigación Biomédica en Red (CIBER) y del Instituto de Investigación Biomédica de Girona (IDIBGI), el cual tuvo como principal objetivo develar los efectos adversos que tiene el consumo de alimentos chatarra y ultra procesados en el cerebro y en la salud mental de las personas. 

Así es como la comida chatarra afecta a una persona con depresión

De acuerdo con el estudio hecho por investigadores del CIBER e IDIBGI, se pronostica que los trastornos depresivos serán la principal causa de enfermedades para el año 2030, padecimiento que limita severamente el funcionamiento psicosocial de quien lo tiene, disminuyendo drásticamente su calidad de vida. 

Dentro de la investigación se asegura que la mayoría de los alimentos ultra procesados o chatarra tienen un muy bajo nivel de nutrientes, además de ser altos en ácidos grasos saturados y trans, azúcares añadidos y sodio, sin dejar de mencionar que su nivel de proteína es en extremo bajo, además de ser potencialmente adictivos.

Tras realizar un estudio con ayuda de 152 participantes, y siguiendo su hipótesis de que el consumo de comida ultra procesada se asocia con un mayor riesgo de síntomas depresivos y un menor volumen de sustancia gris, los científicos concluyeron que, en efecto, sí existe una relación entre un mayor consumo de comida chatarra y la depresión, asociación que fue mucho más notoria en el grupo participante con obesidad, ya que un 58% de ellos la presentó. 

Uno de los hallazgos más relevantes es que la relación que existe entre la depresión y la comida ultra procesada como factor causante de dicha trastorno son los datos que lo asocian con cambios en la estructura de redes cerebrales específicas, y que bien podrían ser dependientes del desarrollo de obesidad. 

¿Qué no se debe comer cuando hay depresión?

Pese a que la alimentación no predispone a alguien a padecer depresión, sí influye como factor de riesgo para intensificar sus síntomas. En este sentido, hay algunos alimentos que pueden afectar tu estado de ánimo cuando tienes un trastorno depresivo, por lo que te sugerimos evitar los siguientes:

• Comida rápida o chatarra
• Chocolate
• Endulzantes artificiales
• Alimentos procesados y embutidos
• Estimulantes, tales como el café, bebidas alcohólicas, bebidas energizantes, etc.
• Lácteos altos en grasa
• Panes dulces

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