Entre las curiosidades que a veces se encuentran en internet, hay una oferta que ha llamado la atención de coleccionistas y curiosos por igual: una colección de dos monedas mexicanas con la imagen de la diosa Coyolxauhqui que se ofrece por un millón de pesos. Aunque parezca sorprendente, este tipo de anuncios no son raros en plataformas de compraventa, donde los precios pueden variar enormemente según lo que el vendedor cree que vale su pieza.
Estas monedas, de 50 pesos cada una, fueron acuñadas entre 1982 y 1984 como parte de una emisión conmemorativa dedicada a las culturas mesoamericanas. En particular, la imagen de Coyolxauhqui en el reverso hace alusión al importante hallazgo arqueológico de 1978 en el Templo Mayor de la Ciudad de México, donde se descubrió un gran disco de piedra con su figura.
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Aunque la pieza ya no está en circulación desde noviembre de 1995 y no contiene metales preciosos, su valor como objeto de colección ha ido creciendo en ciertos círculos especializados.
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¿Qué hace tan especial a esta moneda y por qué se ofrece en un millón?
El valor histórico y cultural de la moneda es innegable. Su diseño representa una conexión directa con el pasado mexica y con un hallazgo arqueológico de gran relevancia para la historia de México. Sin embargo, eso no garantiza automáticamente un valor comercial elevado.
En este caso, la oferta por un millón de pesos incluye dos monedas que, según las fotografías del anuncio, se encuentran en estado aceptable, sin daños visibles, aunque tampoco parecen piezas perfectamente conservadas. Cabe aclarar que, según sitios especializados como Numista, una sola moneda en excelente estado (categoría UNC, sin circular) puede llegar a cotizarse alrededor de 5,245.50 pesos mexicanos. Esto hace que la cifra del millón parezca más una expectativa del vendedor que un precio realista basado en estándares del mercado numismático.
¿Cómo saber si tu moneda vale realmente tanto?
Para entender si una moneda antigua como esta tiene un valor alto, se deben considerar varios factores:
- Estado de conservación. Mientras mejor conservada esté la moneda, mayor será su valor.
- Año de emisión. Algunas fechas pueden ser más raras que otras.
- Demanda entre coleccionistas. Si hay mucho interés por una pieza específica, su valor sube.
- Rarezas o errores. Monedas con errores de acuñación pueden elevar su precio, aunque no siempre.
Es muy importante tener presente que estas monedas ya no tienen valor oficial ante bancos o instituciones financieras, ya que fueron desmonetizadas. Es decir, su único valor posible es dentro del mundo del coleccionismo, y esto no siempre garantiza precios extraordinarios.
En caso de tener una moneda como esta o encontrarte con precios muy elevados en internet, lo mejor es acudir con un experto en numismática. También puedes visitar centros especializados donde ofrecen tasaciones profesionales. Así evitas caer en sobreprecios o malentendidos sobre el valor real de tu pieza.
Recuerda que, en el mundo de la numismática, no todo lo que parece antiguo vale una fortuna. La emoción de encontrar una pieza única puede ser grande, pero siempre será mejor tomar decisiones informadas.
Antes de comprar o vender, lo ideal es buscar asesoría profesional y no dejarse llevar solo por los precios vistos en internet.
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