La moneda mexicana de 1,000 pesos con la imagen de Sor Juana Inés de la Cruz es uno de esos objetos que suelen despertar la curiosidad de quienes la encuentran en casa o heredan una colección antigua. Fabricada entre 1988 y 1992, esta pieza conmemora a una de las figuras más importantes de la literatura novohispana y forma parte del grupo de monedas desmonetizadas a mediados de los años noventa.
Muchas personas piensan que, al tratarse de una moneda antigua y con un personaje histórico importante, podría valer una fortuna. Sin embargo, no todas las monedas viejas son valiosas por el simple hecho de ser antiguas. Es importante conocer las características reales de la moneda, así como el contexto en el que se fabricó, para saber si tiene un valor significativo o no en el mercado actual.
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La moneda de 1,000 pesos de Sor Juana está hecha principalmente de cobre, con pequeñas proporciones de aluminio y níquel. Aunque fue una moneda de uso común en su época, dejó de tener validez oficial el 15 de noviembre de 1995. Esto quiere decir que ya no tiene valor como dinero en circulación, pero sí puede tener un precio de venta si es de interés para coleccionistas.
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¿Cuánto vale en realidad esta moneda en 2025?
Según datos de sitios especializados como Numista, una moneda de Sor Juana en estado "sin circular" (UNC) (es decir, que no ha sido usada y conserva su brillo original) puede alcanzar un precio promedio de 102.54 pesos mexicanos, especialmente en su versión de 1990. Sin embargo, este valor puede bajar considerablemente si la moneda está desgastada, rayada o sucia.
Al tratarse de una moneda hecha de bronce de aluminio, su contenido metálico tampoco la hace especialmente valiosa en términos de inversión. El valor del cobre en el mercado internacional no suele ser tan alto como el del oro o la plata, por lo que no es común que casas de empeño la compren por su peso en metal.
Tampoco es una moneda aceptada por instituciones financieras como bancos, ya que está desmonetizada y no pertenece a la familia de monedas válidas para operaciones actuales. No obstante, sí puede venderse en casas numismáticas o a coleccionistas interesados, sobre todo si está en buen estado.
Siempre hay que tener cuidado con precios inflados en internet a la hora de vender la moneda de 1,000 pesos de Sor Juana
En plataformas como Mercado Libre o redes sociales es común encontrar esta moneda a la venta por cientos o incluso miles de pesos, lo cual puede generar confusión. Muchas veces estos precios no se basan en una evaluación profesional, sino en la percepción del vendedor. Es por eso que se recomienda ser muy cauteloso al comprar o vender monedas antiguas por internet.
Antes de hacer cualquier trato, lo ideal es consultar con un especialista en numismática o acudir a una tienda de monedas establecida. Ellos pueden revisar la pieza, verificar si tiene alguna rareza o error de acuñación que le dé un valor adicional, y ofrecer un precio justo de acuerdo con el mercado.
Si no planeas venderla, esta moneda también puede tener un valor sentimental o educativo. Representa un periodo económico interesante de México y rinde homenaje a una mujer histórica de gran relevancia. Conservarla en un estuche adecuado puede ayudarte a mantenerla en buen estado y, quién sabe, quizás en el futuro su valor aumente entre coleccionistas.
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