Huracán Alberto: Conagua detecta 10% de probabilidad de desarrollo ciclónico en el Atlántico

Los ciclones tropicales, según la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA), son remolinos gigantes que cubren miles de kilómetros cuadrados y se sitúan en espacios oceánicos. Las condiciones atmosféricas, sin embargo, provocan una evolución y desarrollo que llega a convertirlo en huracán: este fenómeno natural provoca vientos de hasta 200 km/h.

El pasado 23 de mayo, la CONAGUA emitió un comunicado sobre la detección de un 10% de probabilidad de desarrollo ciclónico en el Atlántico, atribuido al huracán Alberto. Esta alerta ha despertado la atención de las autoridades y la población en general, quienes se mantienen en estado de precaución ante la posible evolución y trayectoria de este fenómeno meteorológico.

Zona de vigilancia en el océano atlántico 

En el seguimiento del huracán Alberto en el océano Atlántico, se mantiene la vigilancia sobre una zona de baja presión con potencial de desarrollo ciclónico. La Comisión Nacional del Agua (Conagua) ha reportado que esta área presenta una probabilidad del 10% de evolucionar en un evento ciclónico tanto en las próximas 48 horas como en los próximos 7 días. 

La zona de baja presión se localiza actualmente en la zona oriente de Cuba, aproximadamente a 1mil 420 kilómetros al este de las costas de Quintana Roo. Su desplazamiento actual es lento, moviéndose hacia el noroeste. 

Hasta el momento, la zona de baja presión en el océano Atlántico continúa siendo objeto de seguimiento y análisis por parte de los expertos en meteorología. Aunque se encuentra a una distancia considerable de las costas de Quintana Roo y su probabilidad de desarrollo ciclónico es baja, se recomienda a la población mantenerse informada a través de fuentes oficiales y seguir las indicaciones de las autoridades pertinentes.