A lo largo de la historia, los libros han ocupado un papel fundamental en la vida de todas las personas, pues no solo son un medio de entretenimiento sino más importante aún, son la manera en que se pueden obtener conocimientos de diferentes temas. Con eso en mente, desde 1995 cada 23 de abril se celebra el Día Mundial del Libro.
La intención de este efeméride es fomentar el hábito de la lectura y extender el uso de los libros como medio de difusión de la cultura y el conocimiento. Esto, ya que además, forman parte del legado de conocimientos de las civilizaciones pasadas y del saber y tecnología que derivaron de ellas.
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Además, este día también se celebra el Derecho de Autor. Se trata de una medida que se implementó para proteger la propiedad intelectual de aquellos que a través de los libros expresaban opiniones, teorías, historias. Surgió como una forma de evitar el plagio de las obras originales de los autores.
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¿Por qué se celebra el Día Mundial del Libro?
La celebración de este día fue proclamada por la Conferencia General de la UNESCO en 1995. Ha ayudado a que cada vez más personas se acerquen a los libros ya sea como escritores o como lectores.
Eso ha permitido descubrir, valorar y explorar muchas vertientes distintas del mundo editorial. Por ejemplo, el libro como vehículo de valores y conocimientos y el libro como puerta de acceso a la diversidad de las culturas y como instrumento de diálogo
Además, con el objetivo de seguir impulsando las celebraciones de este día, cada año se elige una ciudad diferente como la "Capital Mundial del Libro", acción que ayuda a extender más la influencia geográfica y cultural de los libros
En esta ocasión, la UNESCO y las organizaciones internacionales que representan a los tres principales sectores de la industria del libro -editores, libreros y bibliotecas– seleccionaron a Estrasburgo para mantener el impulso de las celebraciones de este día hasta el año siguiente.
¿Qué relación tiene el Día del Libro con William Shakespeare?
Esta fecha simbólica de la literatura universal coincide con la del fallecimiento de William Shakespeare. El escritor fue autor de obras tan emblemáticas como "Romeo y Julieta", "Hamlet", "Otelo", entre otros.
Sin embargo, cabe destacar que aunque la bibliografía que detalla que murió el 23 de abril de 1616 es la Enciclopedia Británica, la fecha podría estar mal.
La razón, es el calendario que regía a Reino Unido en aquella época.
Hasta 1582 la parte occidental del mundo se regía por el calendario juliano, impuesto por el emperador romano Julio César. Pero no tardó mucho en hacerse un reajuste pues ese mismo año el papa Gregorio XII creó el suyo propio: el gregoriano.
Aún así, pasaron más de 100 años para que el Reino Unido adoptara ese calendario de acuerdo con el sitio web Aciprensa.
Esto quiere decir que en 1616, cuando falleció Shakespeare, Inglaterra se regía por calendarios que diferían en 10 días por lo que sería correcto pensar que el 23 de abril de Reino Unido era, en gran parte del mundo occidental el 3 de mayo de 1616.