La actividad sísmica en México es uno de los temas que más interés despiertan en la población en general, motivo por el que el Servicio Sismológico Nacional (SSN) de la Universidad Nacional Autónoma Nacional (UNAM), monitorea todos los días los sismos ocurridos en las distintas partes del país, con el fin de llevar una lista detallada de las afectaciones que estos fenómenos naturales pueden tener en la población de toda la República Mexicana.
Y es que aunque los sismos no se pueden predecir, las autoridades y los científicos en general han buscado formas de prevenir a partir lo que se conoce acerca de los sismos, por lo que constantemente circula información sobre qué hacer en caso de terremoto, acciones que implican cosas antes, durante y después, pues aunque no se puede predecir, las medidas preventivas incluyen estar consciente de las salidas de emergencia de tu edificio en caso de tener que vivir un sismo.
Te podría interesar
Para este domingo 31 de marzo, el Sismológico Nacional, ha emitido un reporte de los últimos 20 sismos ocurridos en México, asegurando que se han registrado al menos cinco de intensidades mayores a los 4.0 grados de magnitud, el último de ellos ocurrido al sureste de Tonalá, Chiapas. Asimismo, el Sismológico Nacional registró dos microsismos en Oaxaca y Guerrero, mismos que tuvieron una magnitud de 2.8 y 2.3 grados respectivamente, siendo los 13 restantes de magnitudes entre los 3.0 y los 3.9
Te podría interesar
¿Cuál es el riesgo sísmico de la CDMX?
A pesar de que no se pueden predecir los sismos, si existen otros factores que ayudan a comprender las posibles afectaciones en caso de que ocurra uno de estos, ese es el caso del riesgo sísmico, un término que se refiere a la probabilidad de que un sismo ocurra dentro de un período y lugar determinados, además de la posibilidad de que cause pérdidas o daños. Para calcular este riesgo sísmico, las autoridades estudian diversos factores como los posibles efectos locales de amplificación tras las ondas sísmicas, además de qué tan seguras son las construcciones en un espacio determinado, y la rección de las instituciones y autoridades, por lo que el riesgo sísmico varía según la ciudad en la que se evalúe.
Sin embargo, México se sitúa en una zona de gran actividad sísmica y volcánica, por estar en la placa tectónica de Platas, y en el llamado cinturón de fuego, donde se registra una intensa actividad sísmica como parte de los movimientos entre las placas por las que se encuentra situado nuestro país, siendo las responsables de los movimientos la paca Norteamericana, la de Cocos, Rivera y del Pacífico. Es por ello que en México se registra en promedio 90 sismos por año con magnitudes superiores a los 4 grados, siendo esto el 60% de todos los sismos ocurridos en el mundo.
sigue a Heraldo Binario en Google News, dale CLIC AQUÍ