El reciente ajuste a la Ley de Vivienda en la Ciudad de México, que entró en vigor el 29 de agosto de 2024, busca frenar el aumento desmedido de las rentas y proteger a los arrendatarios de incrementos excesivos. Esta reforma implica cambios importantes en el Código Civil local y establece nuevas normativas que tanto propietarios como inquilinos deben conocer. Aquí están 4 puntos para entender mejor estas modificaciones.
1. El incremento de la renta estará limitado a la inflación
Uno de los aspectos más destacados de esta reforma es que el incremento anual de la renta no podrá ser mayor que la tasa de inflación registrada en el año anterior, según lo reportado por el Banco de México. Antes de esta modificación, los propietarios podían aumentar el alquiler hasta un 10% anual, lo que frecuentemente resultaba en incrementos desproporcionados. Con este nuevo tope se espera que las rentas se mantengan en un nivel accesible y alineado con las condiciones económicas del país.
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2. Registro digital de contratos de arrendamiento
Otro punto crucial de la reforma es la creación de un registro digital obligatorio para todos los contratos de arrendamiento. Este registro, que será gestionado por la Agencia Digital de Innovación Pública, tiene como objetivo ofrecer mayor transparencia y seguridad tanto a arrendadores como a inquilinos. Los propietarios tendrán un plazo de 30 días para registrar los contratos después de su firma, y el incumplimiento de esta obligación podría derivar en sanciones legales.
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Este registro también estará protegido bajo la Ley de Protección de Datos Personales en Posesión de Sujetos Obligados de la Ciudad de México, lo que garantiza que la información no se hará pública, excepto por resolución judicial.
3. Producción pública de vivienda asequible
La reforma también incluye la adición de una fracción Bis al Artículo 5 de la Ley de Vivienda, que establece la figura de producción pública de vivienda para arrendamiento. Esto significa que el Gobierno de la Ciudad de México estará encargado de construir viviendas que se arrendarán a precios accesibles, con prioridad para sectores vulnerables como trabajadores de bajos ingresos, madres solteras y jóvenes entre 18 y 35 años. De esta manera se aumentaría la oferta de viviendas asequibles en una ciudad donde el acceso a la vivienda es cada vez más difícil.
4. Implicaciones para la próxima administración
El Jefe de Gobierno, Martí Batres, señaló que la implementación efectiva de esta reforma será una tarea fundamental para la próxima administración, encabezada por Clara Brugada. La construcción masiva de viviendas públicas de bajo costo será uno de los pilares de la política habitacional en los próximos años, lo que permitirá a más personas acceder a un hogar digno a precios justos.
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