ESTILO DE VIDA

Corea del Sur se está quedando sin niños; pagan 1.3 millones para personas que quieran tener hijos

Este país tiene la tasa de natalidad más baja del mundo, una realidad que ha llevado al gobierno a medidas desesperadas, como ofrecer dinero a las personas que decidan tener hijos

Créditos: Pixabay
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Corea del Sur enfrenta una crisis demográfica silenciosa pero grave: su tasa de natalidad es la más baja del mundo. Según datos de Reuters, la tasa de natalidad surcoreana ha alcanzado mínimos históricos, llevando al gobierno a implementar medidas desesperadas para revertir esta tendencia. Entre estas, se plantea otorgar más de 1.3 millones de pesos a las parejas que decidan tener hijos.

La situación es crítica. De acuerdo con información compartida por la revista Time, se estima que la tasa de natalidad de Corea del Sur disminuya a 0.68 puntos en 2024. Esto significa que, en promedio, cada mujer fértil en Corea del Sur tendrá menos de un hijo en su vida. Para poner esto en perspectiva, el Institut National de la Statistique et des Études Économiques de Francia define la tasa de fertilidad como el número de niños nacidos vivos por mujer en edad fértil en un año determinado. La tasa actual de Corea del Sur no solo es la más baja del mundo, sino que ha venido disminuyendo consistentemente durante los últimos años.

En 2022, la tasa de natalidad era de 0.72, lo cual ya era preocupante. Sin embargo, la continua disminución ha encendido todas las alarmas en el gobierno surcoreano, que ve en esta tendencia un peligro para el futuro equilibrio poblacional y económico del país.

¿Cuánto paga el gobierno de Corea del Sur por tener hijos?

El gobierno surcoreano está desesperado por encontrar soluciones efectivas para este problema. Entre las medidas más sorprendentes se encuentra la propuesta de otorgar cheques por más de un millón de pesos a las parejas que decidan tener hijos. Esta propuesta, lanzada por la Comisión Anticorrupción y Derechos Civiles (ACRC), sugiere el pago en metálico de 100 millones de wones (aproximadamente 1.3 millones de pesos) a hogares con recién nacidos.

La propuesta se hizo pública a través de una encuesta de opinión lanzada en abril, y la respuesta fue tan significativa que la noticia capturó rápidamente la atención de los medios de comunicación nacionales e internacionales. Según The Chosun Daily, la consulta estuvo abierta hasta finales de abril, y las estimaciones apuntan a que, si se implementara, este programa de incentivos consumiría la mitad del presupuesto anual destinado a políticas de natalidad en Corea del Sur.

Leyenda

¿Por qué las personas no quieren tener hijos en Corea del Sur?

La baja tasa de natalidad en Corea del Sur no es un fenómeno reciente. En los últimos 50 años, la tasa de natalidad ha caído dramáticamente de 4.53 bebés por mujer a 0.72 en 2022, según datos de Statista. Esta caída representa una disminución del 75%, un cambio drástico que ha sido impulsado por varios factores sociales y económicos.

Un análisis del canal de YouTube VisualPolitik destaca que uno de los principales factores es la naturaleza conservadora de la sociedad surcoreana. A medida que las mujeres se vuelven más independientes y priorizan sus carreras sobre la vida familiar, la presión para conformarse con los roles tradicionales de género disminuye su deseo de tener hijos. Además, las madres solteras y los matrimonios del mismo género son estigmatizados, lo que complica aún más la situación.

La crisis de natalidad en Corea del Sur podría tener consecuencias devastadoras para el país. Una población en declive significa menos trabajadores jóvenes que puedan contribuir a la economía, lo cual podría llevar a una crisis financiera y social en el futuro cercano. La disminución de la población también afecta la sostenibilidad del sistema de pensiones y la atención médica, poniendo en riesgo el bienestar de las generaciones futuras.

Para enfrentar esta crisis, el gobierno surcoreano necesita implementar una serie de políticas integrales que no solo incentiven económicamente a las parejas a tener hijos, sino que también promuevan un entorno social más inclusivo y equitativo. Esto podría incluir medidas para apoyar a las madres trabajadoras, fomentar la igualdad de género en el hogar y el trabajo, y reducir el estigma asociado con diferentes formas de familia.

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