Ryan Crawford, conocido como 'Brody', se enfrenta a más de cinco años de prisión después de haber admitido su culpabilidad en tres cargos de fraude electrónico relacionados con inversiones de casi 1 millón de dólares en criptomonedas. Este caso no solo ha dejado a numerosas víctimas en la ruina, sino que también destaca la urgente necesidad de una mayor regulación y supervisión en el mercado en constante crecimiento de las criptomonedas para proteger a los inversores de estafas y engaños.
Ryan Crawford se presentaba como un empresario extravagante en el mundo de las criptomonedas. Se promocionaba a sí mismo como el cerebro detrás de una nueva criptomoneda llamada Cheetah Coin, prometiendo lucrativas ganancias a aquellos que invirtieran en su proyecto. Con un estilo audaz y llamativo, llegó incluso a afirmar en un vídeo publicado en 2021: "Estamos a punto de conquistar el mundo". Sin embargo, detrás de estas declaraciones grandiosas se escondía un esquema fraudulento.
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Desde junio de 2020 hasta marzo de 2022, Crawford persuadió a un gran número de personas para que invirtieran casi un millón de dólares en su supuesto negocio. Se hacía pasar falsamente por un exitoso corredor de bolsa con licencia y afirmaba haber amasado una fortuna gracias a sus inversiones en criptomonedas y acciones. Para atraer a sus víctimas, hacía afirmaciones infundadas sobre su capacidad de pagar a los inversores de manera puntual y promovía un software de Inteligencia Artificial (IA) para trading e inversiones que supuestamente nunca había incurrido en pérdidas en sus decisiones financieras.
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Sin embargo, la investigación del Departamento de Justicia reveló que todas las promesas de Brody eran simples señuelos. En lugar de devolver los fondos a las víctimas o generar los extraordinarios rendimientos que había prometido, desvió fondos y criptomonedas de los inversores para su uso personal. Utilizó estos recursos para costear alquileres de automóviles de lujo y participar en actividades de juego en casinos.
Cómo lograron atrapar al estafador de las criptomonedas
Las estafas relacionadas con criptomonedas se han convertido en un problema cada vez más grave en todo el mundo. En el último año, las víctimas de estafas cripto en ciudades de Estados Unidos, como Miami, han declarado pérdidas por más de mil millones de dólares. Este caso, que ha salido a la luz gracias a la colaboración entre la Fiscalía, las autoridades locales y el equipo de investigación de Telemundo 51 Investiga, es un ejemplo de cómo se están combatiendo estos delitos y cómo se busca llevar a los responsables ante la justicia.
La resolución de este caso es un logro significativo y un ejemplo de la importancia de la cooperación entre diferentes agencias gubernamentales. En este caso, el FBI, el Servicio Secreto y la policía de Miami-Dade trabajaron juntos para capturar a Brody en Colorado en marzo de este año. Esta acción rápida demuestra la seriedad con la que se están abordando los delitos relacionados con criptomonedas y envía un mensaje claro a los estafadores de que no quedarán impunes.
Durante el proceso judicial, Ryan Crawford expresó remordimiento por sus acciones. Aunque no se permitió la entrada de cámaras en la audiencia federal, Brody respondió a los conmovedores testimonios de las víctimas, como el de Alberto Rivera, quien quedó sin hogar a causa del fraude, diciendo: "Lo siento mucho. Cometí un error. No quise causarles daño a todas esas personas".
La procuraduría está trabajando en la notificación de las 74 posibles víctimas para determinar la restitución. Aunque solo 12 han respondido hasta ahora, la cifra asciende a $874,526 dólares. El juez ha programado una audiencia de restitución para enero para dar tiempo a otras víctimas a presentar sus declaraciones financieras. Las víctimas tienen la esperanza de que los fondos de un fideicomiso creado por la familia de Brody se utilicen en parte para compensar el daño causado.