El descubrimiento de 3I/ATLAS ha despertado un enorme interés en la comunidad científica y entre el público en general. Este objeto, identificado como un cometa proveniente del espacio interestelar, abrió nuevas preguntas sobre su composición, origen y sobre las capacidades actuales de la ciencia para analizar cuerpos que no pertenecen a nuestro sistema solar. Desde su detección, astrónomos y agencias espaciales como la NASA y la ESA han seguido de cerca su trayectoria, aunque con limitaciones importantes.
Una de las dudas más frecuentes es por qué la NASA no ha podido acercarse físicamente al 3I/ATLAS para estudiarlo de manera directa. A diferencia de otros cometas o asteroides, este objeto interestelar presenta desafíos técnicos que van mucho más allá de lo que permiten las misiones espaciales actuales, incluso para una agencia con décadas de experiencia en exploración espacial.
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NASA explica por qué no han podido acercarse al 3I/ATLAS
Fue a través de una sesión de preguntas y respuestas en el foro Reddit donde la NASA decidió aclarar esta inquietud que se ha vuelto recurrente tras el paso del 3I/ATLAS. En dicha conversación, especialistas explicaron que, aunque en principio sí es factible diseñar una misión para interceptar un objeto interestelar, hacerlo resulta extremadamente complicado.
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La principal dificultad radica en la velocidad. Pues un objeto como el 3I/ATLAS se mueve a una velocidad muy superior a la de la Tierra y a la de la mayoría de los cuerpos del sistema solar. Actualmente, no existe una nave espacial capaz de acelerar lo suficiente para alcanzar al cometa, igualar su trayectoria y posteriormente regresar con muestras.
Asimismo la NASA explicó que las misiones espaciales suelen apoyarse en asistencias gravitatorias, es decir, maniobras que aprovechan la gravedad de planetas como la Tierra, Venus o Júpiter para ganar velocidad. Sin embargo, este proceso requiere años de planificación y un aviso previo prolongado, algo que no ocurre con los objetos interestelares, que suelen detectarse cuando ya están atravesando el sistema solar.
Además, estos cuerpos solo permanecen cerca de la Tierra por un periodo limitado, lo que reduce aún más la ventana de oportunidad para lanzar una misión de interceptación. Por ello, perseguir y aterrizar en un objeto como el 3I/ATLAS, que viaja a una velocidad “ridículamente rápida”, representa uno de los mayores retos actuales de la exploración espacial.
A pesar de estas limitaciones, la NASA señaló que existen conceptos prometedores, como el Comet Interceptor de la Agencia Espacial Europea (ESA). Esta misión propone mantener una nave en espera, lista para activarse en caso de que un cometa de período largo o un objeto interestelar pase a una distancia accesible, lo que podría cambiar el panorama en el futuro.
¿Qué se sabe hasta el momento del 3I/ATLAS?
Hasta ahora, el 3I/ATLAS ha sido estudiado principalmente mediante observaciones remotas con telescopios terrestres y espaciales. Los científicos han confirmado que se comporta como un cometa natural, con una trayectoria hiperbólica que indica su origen fuera del sistema solar.
También se sabe que pasó miles de años viajando por el espacio antes de cruzar nuestra región cósmica, y que su paso por el sistema solar es breve y no repetible. Aunque no ha podido ser estudiado de cerca, el 3I/ATLAS ha aportado información clave para estimar cuántos objetos interestelares existen en la Vía Láctea.
Este visitante ha dejado claro que la humanidad aún enfrenta grandes desafíos tecnológicos para explorar estos mensajeros del espacio profundo, pero también ha impulsado nuevas ideas que podrían permitir, en el futuro, estudiar más de cerca al próximo objeto interestelar que cruce nuestro camino.
Preguntas frecuentes:
¿Cuántos objetos interestelares han llegado al Sistema Solar?
Hasta ahora se han confirmado oficialmente tres objetos interestelares:
- ‘Oumuamua (2017)
- 2I/Borisov (2019)
- 3I/ATLAS (2025)
¿Es peligroso el 3I/ATLAS para la Tierra?
No. 3I/ATLAS no representa ningún riesgo para la Tierra. Su trayectoria mantiene una distancia segura y no existe posibilidad de impacto.
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