El avance de la ciencia en nuestro país es cada vez más impresionante, la mejor prueba es que recientemente un grupo de investigadores de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) colaboraron en el hallazgo de una nueva especie de lagartija en Chiapas. Su nombre es el dragoncito de Coapilla.
Los dragoncitos (Abronia) son un género de lagartijas muy difícil de trabajar, porque son muy escurridizas, más de lo normal. A veces uno puede coincidir con ellas de manera fácil y puede visibilizar 3 o 4, pero hay días, e incluso semanas, donde no las ves. Entonces este descubrimiento fue de mucho empeño y de mucha inversión en cuestión de tiempo”, señala un comunicado de la UNAM.
Lo más impresionante es que dicho descubrimiento científico implicó un esfuerzo que se inició desde hace 30 años, frente a la necesidad de conocer la diversidad de anfibios y repetiles que viven en México.
#BoletínUNAM Colaboran #ExpertosUNAM en el descubrimiento de una nueva especie de lagartija en Chiapas. Se trata del dragoncito de Coapilla (Abronia cunemica) que es endémico de México > https://t.co/yBGLJWPuBs pic.twitter.com/bBVUuOuuIq
— UNAM (@UNAM_MX) February 18, 2024
El único macho que fue encontrado tuvo un peso de 38 gramos y una longitud aproximada de 12.7 centímetros de largo, pero sin considerar la cola. Mientras que tres hembras adultas registraron un peso de 23 gramos y una longitud de 11 centímetros de largo, al igual sin considerar la cola.
Los investigadores que tuvieron la oportunidad de participar en dicho descubrimiento son miembros de la Facultad de Ciencias de la UNAM: Adrián Nieto Montes de Oca e Israel Solano Zavaleta; incluso el segundo investigador ha tenido la oportunidad de descubrir al menos 20 especies de anfibios y reptiles.
Los datos de la UNAM explican que el dragoncito de Coapilla habita en los árboles que se localizan en el norte de Chiapas, pero es muy probable que no lleguen a existir grandes poblaciones de esta especie; es decir que podría estar en riesgo de extinción.
El problema de las lagartijas del género Abronia es que la mayoría viven en los árboles, y la tala ilegal se ha vuelto un problema muy importante en nuestro país. Por ejemplo, hay datos que señalan que de los bosques mesófilos de montaña que teníamos originalmente en México, solo queda el 10 por ciento. Entonces, este tipo de destrucción tiene consecuencias muy graves para la biodiversidad”, agregó el comunicado.
Finalmente, los investigadores de la UNAM resaltaron que las lagartijas tienen una gran importancia ecológica y social, debido a que ayudan a evitar la proliferación de insectos en zonas urbanas.
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