El COVID-19 vino a cambiar nuestras vidas durante el 2020, 2021 y parte del 2023, pues esta pandemia mundial cobró la vida de millones de personas en todo el Mundo, pero no sólo durante este tiempo, sino que las secuelas siguieron pasando factura y reclamando almas tiempo después, pues algunos experimentaron enfermedades crónicas, otros sufrieron porque las enfermedades que ya padecían se complicaron, afortunadamente otro más sólo se quedaron con pequeños rastros de esta enfermedad, de los cuales aún no logran reponerse en su totalidad. Uno de estos casos es la pérdida del olfato y el gusto, pero al menos ahora ya se cuentan con medicamentos para hacer frente a estos problemas.
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De acuerdo con investigaciones hechas por científicos en diversas partes del mundo, se sabe que la pastilla antiviral llamada Ensitrelvir ayuda a que la duración de dos síntomas causados por el COVID-19 se acorten y nos referimos a la pérdida del olfato y gusto al comer, pues muchas personas aún los recuperan en su totalidad y tratan de llevar sus vidas un poco tranquilas, aunque esto les ha dificultado mucho.
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Una vez que la pandemia por COVID-19 comenzó hace ya 3 años, entre el 40% y 50% de los personas contagiadas que experimentaron estos dos problemas podían consumir el medicamento antiviral molnopiravir, el cual lograba que estos síntomas desaparecieran, desgraciadamente era muy fuerte y solamente los pacientes en estado crítico podían consumirlos, el resto tenían que soportarlos.
Algunos países como Japón ya han puesto el ensitrelvir a disposición de la ciudadanía, pues desde el año pasado recibió la aprobación de emergencia y los ciudadanos con síntomas leves a moderados pueden hacer uso de él. Cabe destacar que el creador de este fármaco es japonés y continúa realizando ensayos clínicos a fin de encontrar aún más beneficios y reducir los daños o riesgos que pueda representar.
"La mayoría de las personas eventualmente se recuperan por sí solas, pero sabemos que algunas personas han tenido problemas a largo plazo con el olfato y el gusto", informó la empresa Shionogi, quien es el dueño. Cuando las variantes de Omicron se volvieron dominantes, la pérdida del gusto y el olfato comenzó a ser cada vez menos común", dice Amesh Adalja, especialista en enfermedades infecciosas del Centro Johns Hopkins para la Seguridad de la Salud en Baltimore, Maryland.