El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) informó que ha concluido la Temporada de Lluvias 2024 en México. Este período del clima se caracterizó por una actividad mayor en comparación con los años anteriores, especialmente durante los meses de septiembre y octubre, que registraron niveles históricos de precipitación en varias regiones del país.
La Temporada de Lluvias, que habitualmente se extiende de mayo a noviembre, tuvo una incidencia significativa en diversos estados de la República, tanto por sus beneficios como por los desafíos que implicó. Durante este ciclo del clima, las lluvias jugaron un papel fundamental en la recarga de mantos acuíferos, el aumento de los niveles de presas y ríos, así como en la mitigación de la sequía que había afectado a ciertas regiones en los últimos años en México.
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Alertan por las consecuencias de la Temporada de Lluvias 2024
Sin embargo, la intensidad de las lluvias en México también generó situaciones adversas, destacando los riesgos asociados con inundaciones y deslaves en zonas vulnerables. Durante septiembre y octubre, las lluvias torrenciales provocaron daños en infraestructura urbana y rural, así como afectaciones directas a miles de familias que se vieron desplazadas por las crecientes de ríos y arroyos.
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El SMN destacó que el comportamiento de la Temporada de Lluvias influido por diversos factores climáticos, incluyendo el fenómeno de El Niño, que este año tuvo un impacto significativo al modificar los patrones de precipitación en el Pacífico y el Atlántico. Este fenómeno contribuyó a una distribución irregular de las lluvias, con episodios de precipitación concentrados en cortos periodos y en regiones específicas, generando desafíos para la planeación y gestión de recursos hídricos.
Entre los beneficios más destacados de esta temporada de lluvias, se encuentra la recuperación de cuerpos de agua que habían enfrentado niveles críticos en años recientes. Estados como Chihuahua, Durango y Zacatecas, que en el pasado habían sufrido sequías severas, reportaron un aumento considerable en sus reservas hídricas gracias a este clima, lo que podría traducirse en un mayor abastecimiento para consumo humano y actividades productivas en los próximos meses.
No obstante, la abundancia de lluvias también subrayó la necesidad de fortalecer las estrategias de prevención y respuesta ante desastres naturales. El exceso de agua provocó desbordamientos en varias cuencas y ríos importantes, así como deslizamientos de tierra en zonas montañosas. Estos eventos pusieron en evidencia las vulnerabilidades de comunidades que habitan en áreas de alto riesgo y la importancia de implementar medidas de mitigación más eficaces.
De cara al futuro, el cierre de la Temporada de Lluvias 2024 en México marca el inicio de una etapa de análisis y evaluación. Las lecciones aprendidas este año serán fundamentales para mejorar los pronósticos y preparativos en los próximos ciclos. Asimismo, se espera que la información recopilada por el SMN sirva para afinar los modelos climáticos y promover políticas públicas que equilibren los beneficios del agua con la prevención de sus efectos adversos.
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