La industria de los videojuegos ha experimentado un crecimiento exponencial en los últimos años, no solo la pandemia contribuyó a que las consolas fueran esa ventana de salida y construcción de un entorno digital que permitiera la convivencia cuando el confinamiento estuvo en un punto crítico, también la penetración de los juego móviles y las experiencias inmersivas han ganado terreno, de ahí que los rumores y las filtraciones de cada una de las compañías de entretenimiento gamer sea de gran relevancia al enmarcar el rumbo para los siguientes años.
En esta ocasión, la noticia que ha salido a la luz va mucho más allá de las habituales especulaciones sobre títulos y características. Los documentos filtrados, parte de un caso legal en curso contra Microsoft por la Comisión Federal de Comercio (FTC), han dejado entrever los ambiciosos planos de la gigante tecnológica para el futuro de Xbox, y la fecha que se ha deslizado por debajo del radar es 2028.
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A lo largo de las décadas, Xbox reforzó las innovaciones y se fijó como la gran competencia de Sony, no solo por la llamada guerra de consolas, sino por sus títulos, apuestas como el Gamepass y oferta que maneja el gigante estadounidense, ahora, gracias a una publicación de The Verge se puede vislumbrar el camino que seguirá la empresa para el cierre de esta década.
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Los documentos filtrados desvelan los planos de Microsoft para 2028, una fecha que puede parecer lejana, pero que es crítica en su estrategia. La compañía busca lograr una "convergencia total" entre su plataforma de juegos en la nube y su hardware físico, dando lugar a lo que denominan "juegos híbridos en la nube".
¿Nueva consola Xbox para 2028?
La visión de Microsoft es desarrollar una plataforma de próxima generación que aproveche la potencia tanto del cliente (hardware físico) como de la nube para ofrecer experiencias de juego revolucionarios. Esto plantea una pregunta fundamental: ¿cómo planea Microsoft lograr esta hazaña tecnológica?
En los documentos filtrados, Microsoft introduce el concepto de "Computación Híbrida Cohesiva". Esta arquitectura se basa en la interconexión de la nube y el hardware a través del silicio, los gráficos y los sistemas operativos, permitiendo un juego ubicuo. Para llevar a cabo este ambicioso proyecto, Microsoft podría colaborar con AMD para el desarrollo del silicio, incluyendo gráficos Navi 5 y núcleos de CPU Zen 6. Además, se considera la posibilidad de involucrar a ARM en el proceso.
Un componente esencial en esta ecuación es una NPU (Unidad de Procesamiento Neuronal) que proporcionaría beneficios como la súper resolución, la compensación de latencia y la interpolación de la velocidad de fotogramas, lo que podría revolucionar la calidad de las experiencias de juego.
A continuación se muestra la hoja de ruta a seguir, según las filtraciones y las imágenes mostradas por The Verge.
Los documentos también desglosan una hoja de ruta tentativa que abarca varios años. Según esta hoja de ruta, el diseño de hardware podría comenzar en 2024, los primeros kits de desarrollo estarían disponibles en 2027 y los primeros juegos de nube híbrida podrían ver la luz entre 2024 y 2026. Sin embargo, es importante destacar que estos planos podrían cambiar, como ha sucedido en el pasado en la industria de la tecnología.
Antes de llegar a este punto, Microsoft tendría que tomar decisiones críticas sobre el silicio, la construcción de un sistema operativo eficiente para ejecutar partes locales de juegos en la nube y decidir qué equipos serían responsables de llevar a cabo este ambicioso proyecto. La colaboración y alineación de talento en toda la empresa serán esenciales para dar vida a esta visión unificada.
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