En la actualidad, tener una tarjeta de crédito es una gran ayuda financiera, siempre y cuandos sepas utilizarla de manera correcta. Ya que al hacer un buen uso de ella, es posible financiarse por hasta 50 días extra sin pagar comisiones, el único requisito indispensable es cumplir con las fechas de corte y fecha de pago.
Sin embargo, a pesar de ello, es muy importante que estés 100% seguro de que puedes hacerte cargo del compromiso que conlleva una tarjeta de crédito, pues si en algún momento te llegan a ofrecer alguna tarjeta de crédito preaprobada, debes saber que es tu obligación recoger dicho plástico en la sucursal bancaria o de lo contrario tus finanzas podrían verse afectadas con el cobro de la anualidad.
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Si no recojo o activo mi tarjeta de crédito, ¿me cobran anualidad?
De acuerdo con la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (CONDUSEF), el haber aceptado una tarjeta de crédito preaprobada y no recogerla podría tener varias consecuencias, no solamente el hecho de que comienza a correr el periodo para el cargo de la anualidad. Estas son algunas otras consecuencias:
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- Adeudos por comisiones: al ser un producto que no solicitaste, no tuviste la oportunidad de comparar y puede que no sea la más adecuada para tu bolsillo, con esto nos referimos a que no sabes qué tan caras son sus comisiones.
- Problemas serios como un robo de identidad: si de una forma ya te hicieron llegar una TDC sin tu autorización o solicitud, seguramente es porque tienen tus datos personales. Toma cartas en el asunto de manera instantánea, no es cualquier cosa.
- Una mala nota en tu historial crediticio, la cual podría durar varios años: si por alguna razón se llega a activar la TDC o no la has cancelado, te puede generar costos como la anualidad, que al no pagarlos se convierten en una mala nota ante el Buró crediticio.
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