CIENCIA

¿Qué esconde la misteriosa cueva en la Luna que acaban de descubrir los científicos?

La reciente investigación fue conducida por un grupo de científicos italianos. Esta cueva sería ideal para albergar vida humana en la Luna en los próximos años

Créditos: Pixabay/ Adobe Express
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La Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA) y SpaceX, empresa del magnate Elon Musk planean enviar a los humanos de regreso a la Luna a finales de esta década, pero en la superficie lunar, los astronautas estarán expuestos a rayos cósmicos potencialmente mortales y a temperaturas extremas. Sin embargo, es  posible que los científicos hayan encontrado un escondite adecuado para estas condiciones implacables: una cueva recién descubierta.

Un grupo de científicos de Italia aseguró haber identificado la primera cueva en la Luna que se extiende desde el interior de un pozo ubicado en el Mar de la Tranquilidad. El descubrimiento podría representar un sitio prometedor para que los humanos construyan una base lunar pues ofrece refugio contra el difícil entorno de la superficie, además de que podría apoyar la exploración humana del satélite natural de la Tierra a largo plazo. 

"Hace más de 50 años que se teoriza sobre estas cuevas, pero es la primera vez que demostramos su existencia", afirmó el autor del estudio Lorenzo Bruzzone, profesor de la Universidad de Trento (Italia). 

Desde que la nave espacial SELENE de JAXA descubrió por primera vez pozos en la Luna en 2009, los científicos se han preguntado si conducían a cuevas que podrían explorarse o usarse como refugios. Se cree que hay más de 200 pozos lunares, de los cuales 16 parecen ser "tubos de lava" colapsados; conductos naturales que antes estaban ocupados por lava fundida.

Si el techo de un tubo de lava solidificada se derrumba, se abre un pozo, pero durante mucho tiempo no se sabia si estos pozos proporcionaban acceso a las cuevas... Hasta ahora. 

¿Dónde se ubica la primera cueva descubierta en la Luna?

El equipo integrado por los científicos de Italia, se centró en un pozo aproximadamente cilíndrico que se ubica en una parte del hemisferio norte de la luna, conocido como el Mar de la Tranquilidad. La Base Tranquility, el lugar donde se realizó el primer alunizaje tripulado en julio de 1969, está ubicada en la esquina suroeste del "Mare Tranquillitatis".

Mare Tranquillitatis Pit es el pozo más profundo conocido en la Luna con una profundidad estimada de 100 metros y hasta 115 metros de ancho; aproximadamente la longitud de un campo de fútbol. El Lunar Reconnaissance Orbiter de la NASA, lanzado en 2009, capturó datos de radar del pozo durante un sobrevuelo hace más de una década, pero ahora el equipo de científicos volvió a analizar los datos del radar con nuevas "técnicas complejas de procesamiento de señales". 

Según los resultados, una parte de los reflejos del radar que se originan en el pozo pueden identificarse como un "conducto subterráneo de una cueva; de decenas de metros de largo". 

"Gracias al análisis de los datos pudimos crear un modelo de una parte del conducto. Hemos descubierto reflejos de radar en la zona del pozo que se explican mejor por un conducto subterráneo de una cueva. Este descubrimiento proporciona la primera evidencia directa de un tubo de lava accesible bajo la superficie de la Luna", afirmó Leonardo Carrer, investigador de la Universidad de Trento. 

Esta nueva investigación tiene implicaciones para el desarrollo de misiones a la Luna, donde el ambiente es hostil a la vida humana. Y es que el satélite natural de la Tierra es conocida por sus temperaturas demasiado extremas para sustentar la vida pues en el día se pueden experimentar temperaturas de hasta 126 grados Celsius, mientras que en la noche descienden hasta unos gélidos -137 grados centígrados. 

Sin embargo, los científicos creen que las temperaturas en la cueva recién descubierta son "cómodas", pues en promedio es de 17 grados Celsius, lo que sugiere que podrían ser los lugares perfectos para instalar campamentos y base lunares, además de que brindará protección contra los rayos cósmicos y los miles de meteoritos que se cree que chocan contra la Luna cada año a los humanos que habiten en el astro. 

También abre la posibilidad de que otros pozos lunares conduzcan a cuevas, lo que daría a los viajeros espaciales más opciones a la hora de planificar el establecimiento de asentamientos. Para leer el estudio del reciente descubrimiento hecho en la luna, da clic AQUÍ para verlo en inglés.

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