De acuerdo con el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS) el día de hoy se registró un temblor de 6.7 grados a 26 kilómetros de la población que habita Burias, ubicado en el extremo sur de Filipinas, con un hepicentro a 77 kilómetros de profundidad. No obstante, el peligro no ha pasado ya que debido a que este sismo fue en una zona de islas, se teme que se pueda dar un tsunami, aunque hasta el momento no hay una alerta oficial por parte de las autoridades.
Fue a través de varios videos compartidos en redes sociales donde se puede ver los grandes daños y destrozos que causó este evento, ejemplo de ello es un video en un centro comercial donde se puede observar a las personas corriendo o protegiéndose debajo de las mesas, mientras se caían y se mueven las cosas.
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Asimismo, en otro video compartido se puede observar como el mar retrocedió por unos instantes tras el sismo, por ello la sospecha del tsunami.
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El USGS explicó que el mar de Filipinas se encuentra en una zona conocida como Anillo de Fuego del Pacífico, esta es una zona conocida por tener una gran cantidad de actividad sísmica y volcánica, donde anualmente se registran aproximadamente unos 7 mil terremotos, esto porque colinda con las largas placas del Pacífico y Eurasia y la pequeña placa de Sunda. De hecho, la placa del Pacífico subduce debajo del manto, muy cerca de Japón, país en donde también ocurren frecuentemente terremotos.
¿Por qué esta temblando mucho últimamente?
Seguro te habrás percatado que últimamente hay muchas noticias sobre temblores de gran magnitud ocurridos alrededor del mundo y te habrás preguntado el por qué, no obstante, ni los más expertos sismólogos pueden dar una respuesta a esta pregunta.
“Los sismos son un fenómeno inherente al interior de la Tierra, y nada tiene que ver con fenómenos atmosféricos o cualquier otro”, explicó Luis Robles, investigador del Departamento de Sismología del Instituto de Geofísica de la Universidad Nacional Autónoma de México.
De hecho, cada año se producen alrededor de 200,000 terremotos en el planeta, pero muchos de estos pasan inadvertidos porque son muy leves o porque ocurren en zonas alejadas a las poblaciones. Estos se producen como medida de liberación repentina de la tensión en la corteza terrestre.
“Sabemos que la tensión se está acumulando en las grandes fallas y sabemos dónde están éstas, pero no tenemos modo de saber en qué momento la van a liberar […] En términos físicos es completamente impredecible", comentó Richard Luckett, sismólogo del British Geological Survey.