La República Checa es el país con el mayor consumo de cerveza per cápita del mundo (los checos consumen una media de unos 160 litros al año) y cuenta con uno de los pocos lugares donde la cerveza es más barata que el agua. Sin embargo, es difícil predecir si esta información será cierta en un futuro próximo.
Agua, levadura, malta de cebada y lúpulo. Estos son los ingredientes de la cerveza, que es la bebida más consumida en el mundo después del té y el agua. El cambio climático ha amenazado durante mucho tiempo la producción de cereales, pero según un nuevo estudio, ha obstaculizado durante décadas la producción de otro ingrediente clave, el lúpulo.
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La producción checa de cerveza está amenazada. Esto es según un estudio realizado por universidades de China, el Reino Unido y los Estados Unidos, que se centró en cómo el cambio climático podría afectar significativamente la producción de cebada. Dabo Guan, economista climático del University College London, es uno de los principales científicos involucrados en el estudio.
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En una entrevista con Radio Praga Internacional explica el objetivo de la investigación. “Estamos intentando estudiar el efecto del clima, especialmente los extremos como el calor y la sequía, en el consumo de cerveza.
La razón de la cerveza es que creemos que es un indicador bastante bueno, especialmente considerando el consumo diario en Occidente. Además de para la comunidad científica, la vulnerabilidad de los cultivos es una gran preocupación para los cerveceros. Para ellos, el cambio climático es un riesgo financiero importante.
¿Cómo surge la cerveza?
Se cree que fue la monja benedictina y doctora de la Iglesia Hildegarda de Bingen la primera que, hace casi un milenio, le echó lúpulo a la cerveza. En aquellos tiempos, la bebida se echaba a perder con facilidad. Pero la flor de la Humulus lupulus, una planta de la familia Cannabaceae (la misma que la del cáñamo), es un antibacteriano natural que, al frenar la aparición de microorganismos, da estabilidad al caldo.
El efecto secundario y probablemente no buscado por De Bingen fue añadirle ese aroma y amargor del que el lúpulo tiene de sobra. Aunque egipcios o sumerios ya fabricaban cerveza hace milenios, la versión moderna de la bebida se debe a esta monja alemana y su idea de infusionarla con flores tan amargas.
El cambio climático amenaza a la cerveza: amenaza la calidad y cantidad del lúpulo
A medida que el cambio climático continúa alterando los sabores y la calidad de la cerveza, los productores deben adaptarse a climas más cálidos y secos para mantener los niveles de producción. Las estaciones más cálidas y secas presagian cambios en el crecimiento y el sabor del lúpulo.
Mientras los consumidores discuten otros grandes temas en los bares como la política, la realidad parece ser que el cambio climático ya está afectando a una de las bebidas más emblemáticas del mundo, y nadie parece darse cuenta.
Ahora que esta bebida está en peligro y los esfuerzos globales para limitar el calentamiento climático por debajo de 1,5 grados están fracasando, algunos consumidores creen que preservar la calidad y el sabor de la cerveza es más importante que nunca.