En una reciente conversación para El Heraldo radio, Mauricio Schwartzmann, Country Manager de Mastercard México, trazó un panorama optimista pero realista sobre el rumbo del ecosistema de pagos en el país. Según explicó, México vive una transformación profunda que trasciende la tecnología: es un cambio cultural y estructural que redefine la forma en que los ciudadanos interactúan con el dinero.
Para Schwartzmann, el universo de pagos se asemeja a una orquesta: todos los actores, bancos, fintechs, cámaras de compensación, gobierno y usuarios, deben actuar en sincronía para lograr una economía más eficiente. Y esa armonía ya comienza a sentirse. Tecnologías como los pagos sin contacto, las transferencias en tiempo real y los dispositivos inteligentes han penetrado incluso en comunidades rurales. Hoy, los mexicanos tienen más opciones que nunca para pagar donde sea, como sea y cuando sea —ya sea con su celular, reloj inteligente o cualquier otro método digital.
Esta evolución no solo trae comodidad; también potencia la seguridad, reduce el uso de efectivo y permite el desarrollo de productos financieros personalizados, gracias a los datos que se generan en cada transacción. El resultado: mayor acceso al crédito, impulso al consumo y crecimiento para las micro y pequeñas empresas.
Aunque aún persiste cierta preferencia por el manejo físico del dinero, especialmente por tradición, las cifras muestran un avance constante en la inclusión financiera. Schwartzmann comparó la situación de México con la de Brasil hace siete años, país que logró convertirse en líder global de pagos digitales. En su opinión, se declara optimista y cree firmemente que México va por el camino correcto, podría alcanzar e incluso superar ese nivel antes del fin del actual sexenio.
Digitalizar los pagos no solo moderniza la economía: democratiza oportunidades, reduce desigualdades y fortalece la estructura económica nacional. El efectivo comienza a quedarse atrás. Y con el respaldo de actores como Mastercard, México pisa fuerte hacia el futuro.
MMV