Hoy, 15 de octubre, se lleva a cabo una reunión clave entre el secretario de Economía de México, Marcelo Ebrard Casaubon, y más de 240 empresarios tanto de Estados Unidos como de México en el marco del CEO Dialogue 2024. Este evento es una plataforma de diálogo de alto nivel que busca fortalecer las relaciones comerciales entre ambas naciones y promover el desarrollo económico de la región. El CEO Dialogue se consolida como el principal mecanismo de coordinación entre los sectores privados y públicos de los dos países, reuniendo al Consejo Coordinador Empresarial (CCE) y a la Cámara de Comercio de los Estados Unidos (U.S. Chamber of Commerce).
La reunión de hoy no solo marcará el inicio formal de la colaboración entre el nuevo gobierno de Claudia Sheinbaum y la administración de Joe Biden, y el siguiente sino que también abordará temas críticos para el crecimiento económico de ambos países. De acuerdo con Ebrard, se espera que este encuentro traiga “buenas noticias para México” en términos de inversión y generación de empleos, reafirmando la confianza de los empresarios estadounidenses en la economía mexicana. Esta confianza está respaldada por la solidez de las relaciones comerciales bilaterales, las cuales generan aproximadamente 1.5 millones de dólares por minuto, posicionando a Estados Unidos como el principal socio comercial de México.
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La participación de empresas de sectores clave como salud, energías renovables, tecnología, manufactura, transporte y logística refleja el interés de ambos países por continuar expandiendo sus negocios en áreas estratégicas. Este evento también pone de relieve la creciente competitividad de México en el escenario global, consolidándose como una de las economías más dinámicas del mundo. Con el foco en temas como la inversión, la facilitación del comercio, la energía y el cambio climático, la digitalización y las políticas comerciales, la reunión de hoy promete impulsar una nueva etapa de cooperación económica.
Temas centrales en la reunión de hoy
Uno de los ejes fundamentales de la reunión será el fomento de la inversión. Ebrard ha señalado que este aspecto es clave para aumentar el contenido nacional en los productos y servicios generados en México, además de reducir la dependencia de importaciones. En este sentido, los empresarios discutirán mecanismos para promover un entorno favorable a la atracción de inversiones, con el objetivo de fortalecer las cadenas de valor en la región.
Otro de los temas prioritarios será la facilitación del comercio transfronterizo. México y Estados Unidos comparten una extensa frontera, lo que representa una ventaja competitiva, pero también desafíos logísticos. La discusión se centrará en cómo desarrollar protocolos que aseguren un flujo más ágil de bienes y servicios entre ambos países, reduciendo los costos y tiempos de espera en las aduanas. Además, se abordará la necesidad de fortalecer la infraestructura fronteriza y digitalizar procesos clave para optimizar el comercio bilateral.
En cuanto a la energía y el cambio climático, la generación y distribución de energías limpias será un tema central. México y Estados Unidos buscan avanzar en políticas que promuevan la competitividad regional en este sector, aprovechando la tendencia del nearshoring para atraer inversiones relacionadas con tecnologías limpias y sostenibles. La transición energética no solo es una prioridad para ambos gobiernos, sino también una oportunidad para fortalecer su posición en el mercado global.
El CEO Dialogue puede ayudar a la expansión de México
El CEO Dialogue no es solo una reunión más; representa una oportunidad única para que México y Estados Unidos refuercen su colaboración en áreas estratégicas y avancen hacia un futuro más sostenible y competitivo. Los sectores representados en la reunión, como servicios financieros, manufactura, alimentos y bebidas, tecnología y turismo, están llamados a desempeñar un papel clave en el crecimiento económico de ambos países. A través de este diálogo, se buscará crear condiciones favorables para la inversión, promover la inclusión financiera y digital, y asegurar que las pequeñas y medianas empresas también se beneficien de estos acuerdos.
Con el respaldo de líderes empresariales y gubernamentales, se espera que las discusiones de hoy impulsen acuerdos que no solo fortalezcan el comercio bilateral, sino que también contribuyan a enfrentar desafíos globales como el cambio climático y la digitalización de la economía.
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