El Doctor Nouriel Roubini es profesor de Economía en la escuela de negocios Stern, de la Universidad de Nueva York, Presidente de Roubini Macro Associates (www.nourielroubini.com), y un economista de fama mundial. Saltó a la fama cuando predijo la gran crisis de 2008 y más recientemente ha proclamado que los mercados financieros se encaminan a una catástrofe; derivado de sus constantes anuncios de crisis ha recibido el apodo de “Dr. Doom” (“Dr. Catástrofe”).
El Doctor Roubini publicó un extracto de su nuevo libro intitulado “Mega amenazas: diez peligrosas tendencias que ponen en peligro nuestro futuro, y cómo sobrevivirlas” (“MegaThreats: Ten Dangerous Trends that Imperil our Future, and How to Survive Them”) (2022) en el número 24 (verano 2023) de la revista “Horizons” del “Center for International Relations and Sustainable Development”.
Es nuevamente de esta publicación que le presento las ideas que siguen. Me he limitado a traducirlas personalmente y a adaptarlas al formato de esta colaboración, separándolas por temas.
Vulnerabilidad de los empleos a la inteligencia artificial
“No importa qué trabajo realices, la inteligencia artificial (IA) podría eventualmente hacerlo mejor. ¿Estarán los modernos luditas, por primera vez desde los luditas originales, finalmente en lo correcto? La posibilidad de que una pequeña élite salga beneficiada mientras que todos los demás perderán sus trabajos, sus ingresos y su dignidad es cada vez más real.
Los investigadores Carl Benedikt Frey y Michael Osborne de la Universidad de Oxford examinaron la posible interrupción laboral por parte de las computadoras en 702 ocupaciones. Su estudio, publicado en 2013, determinó que el 47 por ciento de los trabajos en América eran altamente vulnerables a la sustitución por capital informático en un futuro cercano. Durante la Gran Depresión, el 25 por ciento de los estadounidenses estaban desempleados.”
Progreso sin creación de empleos
“Las revoluciones industriales aumentan la productividad. La primera revolución introdujo la energía a vapor. La segunda revolución lanzó la fabricación en masa. La tercera revolución aprovechó la electricidad. Las tres primeras revoluciones industriales eliminaron muchos trabajos pero crearon más nuevos, después de cierta turbulencia.
Ninguna desplazó permanentemente a los humanos. Los ingresos aumentaron a medida que los trabajos en la fabricación atraían a trabajadores agrícolas superfluos a mudarse a las ciudades. Cuando los trabajos de fabricación desaparecieron, el sector de servicios comenzó a contratar.”
??Sin embargo, hoy en día hay menos lugares a los que pueden ir los trabajadores humanos. Las empresas de alta tecnología, el último bastión de carreras fructíferas, emplean a muchos menos trabajadores que los gigantes industriales de generaciones pasadas.
Facebook, ahora Meta, es un buen ejemplo. A finales de 2021, la capitalización de mercado de Meta (el valor combinado de todas sus acciones) era de 942 mil millones de dólares, convirtiéndola en la séptima empresa más valiosa del mundo, pero empleaba aproximadamente a 60,000 trabajadores.
En contraste, Ford Motor Company tenía una capitalización de mercado de 77 mil millones de dólares, pero empleaba a 186,000 trabajadores. Silicon Valley está lleno de riqueza extrema y empresas en rápido crecimiento, pero el sector tecnológico emplea a muchas menos personas que los sectores más tradicionales.”
El papel del procesamiento del lenguaje natural
“El aprendizaje automático ha superado uno de los obstáculos a largo plazo que impedían el avance de la IA: el procesamiento de lenguaje natural. Al permitir que las máquinas escaneen vastos corpus de textos y realicen sus propios análisis de patrones, las IA han aprendido a traducir entre idiomas con un éxito notable y a generar nuevos textos con una autenticidad sorprendente.
El sutil dominio del lenguaje cruza uno de los últimos obstáculos en el camino para satisfacer la denominada Prueba de Turing. ‘Distinguir el texto, las imágenes y el audio generados por IA de los generados por humanos se volverá extremadamente difícil’, dice Mustafa Suleyman, cofundador de DeepMind y hasta hace poco jefe de política de IA en Google, a medida que la revolución de los ‘transformadores’ acelera su poder.
Como resultado, una gran cantidad de empleos de cuello blanco que requieren niveles avanzados de conocimientos se volverán obsoletos. Los humanos no sabrán que sus contrapartes son máquinas.”
La IA como fuente de desigualdad
“A medida que las personas ganen menos, la desigualdad aumentará. La innovación tecnológica es intensiva en capital, favorece las habilidades altamente desarrolladas y ahorra mano de obra. Si eres dueño de la máquina o estás en el 5 por ciento superior de la distribución de capital humano, la IA te hará más rico y productivo.
Si eres un trabajador de cuello azul o blanco de habilidades bajas o medianas, la IA eventualmente reducirá tus salarios y volverá tu trabajo obsoleto. La tendencia ya es visible en las economías avanzadas donde la estabilidad social depende de la oportunidad universal de alcanzar el éxito. Los datos compilados por la Agencia Central de Inteligencia revelan que la desigualdad de ingresos en Estados Unidos coincide aproximadamente con los niveles en Argentina y Turquía.”
“En un mundo impulsado cada vez más por la IA, el pastel de economía podría volverse enorme para aquellos con habilidades altamente desarrolladas que no pueden ser automatizadas y aquellos que poseen los medios de producción.”
“‘Karl Marx tenía razón’, dijo el empresario Jerry Kaplan a una audiencia conocedora de la tecnología en Google. ‘La lucha entre el capital y el trabajo es una propuesta perdedora para los trabajadores. Lo que eso significa es que los beneficios de la automatización naturalmente se acumulan en aquellos que pueden invertir en nuevos sistemas’.”
La desigualdad generará deuda
“La deuda masiva afecta de manera desproporcionada a las personas que quedan atrás, que viven de salarios cada vez más pequeños o de la asistencia pública. Los países menos desarrollados son altamente vulnerables. Aquellos con capital pueden generar ingresos y manejar su deuda. Pero para la mayoría de los trabajadores dejados atrás por las máquinas en ascenso, un pastel económico más grande no resuelve el creciente problema de la deuda; solo empeora.”
“En las próximas décadas habrá ganadores en partes de Europa, China y América del Norte. Muchos otros países se convertirán en perdedores, arrastrados por el desempleo tecnológico y ahogados en una deuda que no pueden servir, mucho menos pagar. La polarización enfrentará a los ricos contra los pobres.”
“Entra en escena el nuevo precariado, trabajadores educados y semi-cualificados que pierden sus carreras frente a la IA y terminan en trabajos temporales con ingresos inestables y sin beneficios. Irán de un trabajo a otro sin futuro, cayendo a través de una red de seguridad que se desgarrará.
¿Y qué sucede entonces? A medida que los ingresos disminuyen, pueden intentar pedir más préstamos. Las cargas de deuda aumentan a medida que se amplían las brechas de ingresos. Una situación fea que actualmente parece intratable empeora sin una solución segura a la vista.”
Alteración de la vida humana
“Estamos corriendo hacia ese destino. No preveo un futuro feliz en el que los nuevos trabajos reemplacen aquellos que la automatización arrebate. Esta revolución parece terminal. La floreciente inteligencia artificial podría alterar la vida humana como la conocemos ahora.”
“¿Una pandemia mortal nos acabará antes de que la transición a las máquinas esté completa? ¿El cambio climático destruirá el planeta antes de que las máquinas racionales vengan al rescate? ¿Nos asfixiaremos bajo una montaña de deuda?
¿O Estados Unidos y China destruirán el mundo en un conflicto militar a medida que la competencia por controlar las industrias del futuro se vuelva extrema? De hecho, quien controle la IA podría convertirse en la superpotencia mundial dominante.” Hasta aquí las ideas del Doctor Roubini; mismas que puede leer directamente en este artículo.
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Por: Emilio Carrillo, abogado especializado en temas de financiamiento, tecnología y M&A. Twitter: @ecarrillop; página web: www.bcarrillog.com. Las opiniones expresadas son personales del autor y no constituyen recomendaciones de inversión; las inversiones en tecnologías novedosas son de muy alto riesgo y cabe la posibilidad de que todos los recursos destinados a ellas podrían perderse.