Dejar tu automóvil “parado” un par de días debido al fin de semana o simplemente porque has decidido no emplearlo para moverte o hacer un traslado prolongado, no tiene mayor repercusión en tu vehículo.
Sin embargo, y aunque para muchos parece lo contrario, dejar de usar el vehículo por mucho tiempo puede traer más repercusiones o daños que, incluso, usarlo en exceso o sin una revisión continua del mismo.
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Pero, ¿cuáles son exactamente los daños que puede presentar tu vehículo al dejar de usarlo durante mucho tiempo?
¿Por qué no debes dejar de usar tu vehículo por mucho tiempo?
Determinar el tiempo exacto en el que un automóvil puede comenzar a presentar problemas por inactividad puede variar debido a diversos factores como: modelo o tipo de coche, factores climatológicos, estado del vehículo, entre otros.
Sin embargo, podemos determinar que en el lapso de un mes, un auto puede comenzar a presentar complicaciones a través de un primer elemento: la batería. Esta puede comenzar a gastarse o agotarse, sobre todo durante la temporada de invierno, al grado de no funcionar si se intenta arrancar.
Posteriormente, serán los neumáticos los siguientes aspectos a considerar. Y es que después de cerca de tres meses de inactividad, estos pueden comenzar a deformarse al grado de ya no recuperarse o arreglarse. De igual manera, perderán aire, presión y firmeza.
Una buena manera de evitar el problema con los neumáticos si no tienes más remedio que dejar de usar tu coche por varios meses, es guardarlo en algún taller en donde se pueda dejar de manera suspendida, es decir, que los neumáticos no toquen el suelo. De igual manera, se pueden inflar una o dos medidas más de lo normal para evitar que estos sufran el paso del tiempo de manera regular.
¿Qué debes revisar en tu vehículo después de no usarlo durante mucho tiempo?
Otro factor o elemento que comenzará a desgastarse de manera gradual será la pintura del coche, y es que a menos que se encuentre dentro de un espacio cerrado y con correcta ventilación, no sufrirá los estragos de la humedad, el sol, entre otros.
En tanto, el motor puede comenzar a presentar rasgos de oxidación si no se usa en un periodo mayor de 3 meses además de que el aceite puede estropearse y “escurrirse” por las paredes de los cilindros.
Además de lo anterior, también es necesario revisar otros elementos como gomas, juntas, manguitos, entre otros para evitar resecamiento o agrietamientos. No debemos olvidarnos de uno de los factores más importantes a revisar como los frenos, los cuales pueden sufrir la falta de líquido de frenos por inactividad. Finalmente, hay que mencionar a la caja de marcha por oxidación además de otros elementos pequeños pero de gran importancia como la bomba de agua, limpiaparabrisas, entre otros.
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