Dos pilotos fueron sido suspendidos de Ethiopian Airlines después de que el vuelo que piloteaban perdió el control y por quedarse dormidos no pudieron aterrizar a tiempo, con lo que permanecieron en altitud de crucero por varios minutos una vez que llegaron a su destino.
De acuerdo con la misma aerolínea, ambos pilotos se quedaron dormidos, en un hecho que se suscitó el 15 de agosto 2022, en un Boing 734 de Ethiopian Airlines, mismo que debía aterrizar en Addis, Abeba, en Etiopía, tras dos horas de vuelo desde Jartum, en Sudán, no obstante, cuando sobrevoló el lugar de llegada previsto, aún navegaba a 11 mil metros.
Por ello, el control de tráfico aéreo intentó ponerse en contacto con el Boing 734 en más de una ocasión, pero fracasó, pues no pudo entablar comunicación con los pilotos de la aeronave.
Finalmente, fue una alarma la que despertó a los pilotos alertándolos de que habían perdido la ventana de descenso y aterrizaron con éxito el avión 25 minutos después.
En un comunicado de prensa, la aerolínea confirmó que los dos pilotos fueron suspendidos: “La tripulación en cuestión ha sido retirada de la operación en espera de una mayor investigación", externó Ethiopian Airlines.
“Se tomarán las medidas correctivas apropiadas en función del resultado de la investigación”, detalló la aerolínea sin entrar más en detalles.
La importancia de brindar a pilotos condiciones de descanso óptimas
El experto en aviación Alex Macheras tuiteó sobre el incidente y lo describió como “muy preocupante”, destacando los peligros del agotamiento físico en los pilotos.
“La fatiga de los pilotos no es nada nuevo y sigue representando una de las amenazas más importantes para la seguridad aérea a nivel internacional”, escribió.
Macheras agregó que el problema es "generalizado" y "una falla en todo el espectro de las aerolíneas, a veces sistemático", como describió a la enfermedad del agotamiento físico.
En junio, el CEO de la aerolínea económica europea Wizz Air enfrentó una reacción violenta después de decirles a los pilotos que simplemente deberían superar su agotamiento físico por ellos mismos:
“No podemos operar este negocio cuando una de cada cinco personas de una base reporta enfermedad, porque la persona está fatigada”, dijo József Váradi, citando tarifas de compensación. “A veces es necesario hacer un esfuerzo adicional. El daño es enorme cuando cancelamos el vuelo, es enorme”.
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