La llegada de la nueva variante de Covid-19, llamada Ómicron, a EU y su rápido aumento de casos registrados han puesto en alerta a varios de los gigantes tecnológicos como es el caso de Google y, recientemente, de INTEL, pues ambas compañías han tomado medidas drásticas ante el avance de la pandemia, como negar el pago de sueldos a quienes no se hayan vacunado.
Y es que, aunque parezca increíble, todavía existen personas que se niegan a aplicarse la vacuna anticovid, razón por la cual, la tasa de contagios siguen aumentando en las últimas semanas.
Se avecina un tsunami para los no vacunados
Las autoridades sanitarias estadounidenses advirtieron que se avecina un tsunami para los no vacunados, una vez que la variante Delta continúa impulsando nuevos casos y hospitalizaciones y la variante Ómicron se extiende rápidamente y pronto podría saturar los sistemas hospitalarios.
En EU ya se espera que Ómicron se convierta en la "cepa dominante" en las próximas semanas, de acuerdo con la directora de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés), la Dra. Rochelle Walensky.
Intel anuncia medidas drásticas
De acuerdo con un documento interno de Intel que fue filtrado, la compañía anunció que los empleados que presenten dificultades para vacunarse por cuestiones de salud o temas religiosos, podrán apelar por una excepción; sin embargo, la empresa advirtió que serán sometidos de manera constante a pruebas de detección de Covid aunque trabajen desde casa.
La recepción de estas solicitudes de excepción serán analizadas hasta el próximo 15 de marzo del 2022.
Asimismo, Intel informó que los empleados cuyas solicitudes sean rechazadas, serán separados de sus puestos de trabajo y no recibirán ningún tipo de pago por sus servicios durante al menos 3 meses; no obstante, contarán con su seguro de gastos médicos.
Aunque la compañía de tecnología no anuncia despidos como hizo Google, sí aclara que dejará sin sueldo a cualquier empleado que no esté vacunado antes del 4 de enero del 2022.
Este tipo de medidas pueden parecer muy radicales, pero la realidad es que surgen para cumplir con la Orden Ejecutiva del Gobierno de Estados Unidos en dónde se estipula que es obligatoria la vacunación de los empleados en las empresas con más de 100 personas contratadas.
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