La temporada de huracanes 2024 inició el 15 de mayo en el Océano Pacífico, mientras que en el Atlántico comenzará el 01 de junio, por ello, el gobierno de México ha comenzado a prepararse, especialmente las entidades costeras más susceptibles a sufrir afectaciones a causa de este desastre natural. A continuación, te detallamos qué es el ojo del huracán y por qué es tan peligroso para los lugares que afecta.
Ante la inminente llegada de la temporada de huracanes 2024 a México es importante que sepas cuáles son las partes que integran a los ciclones tropicales, especialmente el ojo del huracán y por qué es tan peligrosa. Este tipo de fenómenos naturales están compuestos por la pared del ojo, el ojo y las bandas externas.
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De acuerdo con una investigación de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), los huracanes son los más severos de los fenómenos meteorológicos conocidos como ciclones tropicales.
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Se caracterizan por ser sistemas de baja presión con actividad lluviosa y eléctrica. Sus vientos en el hemisferio norte rotan en contra de las manecillas del reloj. Los que alcanzan vientos menores o iguales a 62 km/h son llamados depresión tropical. Los de 63 a 117 km/h, tormentas tropicales y los que exceden 118 km/h, huracanes.
¿Qué partes integran a un huracán?
El ojo del huracán es una zona caracterizada por gran calma y poca nubosidad. Con una medición de aproximadamente 30 a 65 kilómetros de diámetro. Es el centro de la tormenta, mientras que la pared del ojo es la que supone más peligro y en donde se aglutinan las nubes más densas. En esta parte se ubican los vientos más intensos del fenómeno natural.
Por su parte, las paredes del huracán, también llamadas bandas tienen forma de espiral y giran hacia afuera del fenómeno natural como un molino con agua. Es en esta parte en donde se forman los tornados y en donde ocurren las inundaciones. Crean el efecto de que llueva en el mismo lugar.
¿Por qué es peligroso el ojo del huracán?
El ojo del huracán es peligroso cuando el aire incrementa su velocidad a medida que se dirige hacia el centro de la tormenta. Mientras aumenta la velocidad se forma una fuerza con dirección hacia afuera que se conoce como "fuerza centrífuga". Como gira alrededor del centro del fenómeno natural ocurre un tirón hacia la periferia; mientras más pronunciada o rápida es la rotación, más fuerte es la fuerza centrífuga.
Por esta razón, cuando ocurre el huracán llega un momento en donde los cielos se despejan y se vive un estado de completa calma, con lo que las personas creen que ya ha pasado lo peor; la realidad es que sólo ha ocurrido la mitad del ciclón tropical y los peligrosos vientos de la pared regresan al poco tiempo, pero en esta ocasión desde la dirección opuesta.
Por eso es muy importante que si los vientos y las lluvias cesan tras el paso del fenómeno climático las personas NO se confíen en que ya ha pasado lo peor, pues probablemente se encuentran en el ojo del huracán.
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